lunes, 14 de diciembre de 2009

GEORGE WASHINGTON BALL

–210 AÑOS EN EL ORIENTE ETERNO–



Por: Mario Morales Charris 33º
Past Ven.·. Maest.·. Resp.·. Log.·. Lealtad No. 7
Ex Gran Maestro de la Muy Resp.·. Gr.·. Log.·. del Norte de Colombia

Pres.·. Gran Tribunal Soberano «Lázaro Bravo Maury», Cám.·. 31°



«Estoy convencido de que por medio de una justa aplicación de los principios en que está fundada la Masonería se pueden desarrollar la virtud individual y la prosperidad pública; me consideraré siempre feliz en poder promover los intereses de la Sociedad y ser considerado por sus miembros como un hermano digno de su estimación».


GEORGE WASHINGTON BALL[1]



INTRODUCCIÓN

Hablar de George Washington es platicar de uno de los hermanos que más honores ha recibido a lo largo de la historia americana. Pocos hombres han tenido una influencia tan profunda en el curso de la historia humana registrada como él.

Murió en el Monte Vernon de una infección en la garganta hace 210 años, el 14 de diciembre de 1799, dos años después de haber cumplido con su segundo período presidencial, donde logró que su país gozara de mayor libertad económica. Siendo, como era, el artífice de la independencia de su nación y gozando de gran autoridad y de la aclamación de su pueblo, rechazó toda posibilidad de una tercera legislatura para afianzarse al gobierno, entregando civilmente la primera magistratura de la nación a John Adams. ¡Ojalá! esta cualidad sirva de paradigma a muchos mandatarios de hoy que hacen reformar –con su autoridad omnipotente– las constituciones políticas de sus países para hacerse reelegir tres o más veces, aferrándose de esta manera al poder y así mantener su hegemonía en detrimento de la gran mayoría de los grupos sociales de su terruño.

Como político fue un astuto y audaz diplomático así lo justifica el hecho de haber logrado en plena guerra que las trece colonias reunidas en un congreso, aprobaran la Declaración de Independencia. Asimismo, respaldó la idea de los federales que planteaban la centralización del poder. No obstante, mantuvo buenas relaciones con los republicanos que apoyaban la autonomía política de los estados. Fue tal su idoneidad, que para esos días lo escogen delegado a la Convención Constitucional por el Estado de Virginia y después presidente de la misma, lo que nos demuestra que fue un gran conciliador entre las posturas de los republicanos y federalistas.

Sin embargo muchos han cuestionado y subestimado a Washington como político porque para él estaba primero el ser humano como tal antes que cualquier acción o contienda política. En verdad, era muy susceptible a la opinión pública; por tanto, tenía bien claro que el poder supremo recaía en el pueblo a través del juego democrático.

A pesar de poseer un inmenso poder para influir en la opinión pública, siempre fue mesurado en emplearlo en contadas ocasiones, únicamente cuando creyó que era definitivamente necesario para alcanzar un bien común de forma especial.

Algunos historiadores consideran que el libertador de EE. UU., no fue un gran intelectual, pese a que sus métodos, de raciocinio obtenidos en la formalidad, el desarrollo y organización de las fuerzas armadas y el funcionamiento del gobierno, dejaron una huella indeleble en ese país, lo que no sucedió en su campo con un gran número de sus compañeros letrados. Tampoco se le reconoce como un brillante militar; con todo, sus victorias han tenido un profuso impacto a largo plazo en la historia del mundo que muchos otros patriotas.

Washington fue el Comandante en Jefe de las fuerzas estadounidenses en la guerra de la independencia de los Estados Unidos. Luego se convirtió en el primer presidente de este país. Debido a su trascendental contribución en la creación de los Estados Unidos, es conocido como «padre de la nación estadounidense»

Al igual que numerosos patriotas y grandes hombres de la humanidad que hicieron historia, con el pasar del tiempo se convirtió en un ícono; tanto es así que al conmemorarse el bicentenario de su nacimiento en 1932, el entusiasmo de los investigadores provocó la primera colección completa y la publicación de muchos de sus escritos.

En cuanto a su carrera Masónica es mucho lo que se ha dicho, quizá porque nuestros hermanos americanos se entusiasman cuando hacen referencia al caso de que el célebre patriota, cuya remembranza veneran de tal forma que su panteón en las riberas del Potomac lo han convertido en la Meca de América, no sólo era apreciado como un miembro de la hermandad, sino como un caballero que invariablemente supo expresarse de manera fervorosa de la Francmasonería.

Es de gran valor señalar que el presente ensayo tiene como objetivo central, recordar la memoria de nuestro Poderoso Hermano George Washington Ball en sus 210 años de haber pasado al Oriente Eterno. Por consiguiente, haremos un esfuerzo en dar a conocer brevemente su biografía en reconocimiento a su gesta por la causa libertadora de esa gran nación como lo es los Estados Unidos de América del Norte.

BIOGRAFÍA

George Washington nació el 22 de febrero de 1732[2] a orillas del río Potomac, en la finca de Bridge's Creek, en el antiguo condado de Westmoreland, hoy estado de Virginia, EE. UU. Descendiente de una destacada familia inglesa, oriunda de Northamptonshire. Su bisabuelo, el coronel John Washington, acompañado de su hermano Lawrence, emigraron a la colonia de Virginia en 1656, donde lograron acumular grandes posesiones de tierra. Su padre Agustine, quien estudió en Inglaterra, se convirtió en un señor terrateniente, en donde las explotaciones agrícolas las hacía única y exclusivamente con mano de obra esclava, modo de producción propio de la época, y más tarde probó lucrarse con la extracción del hierro.

Agustine contrajo matrimonio con Jane Butler, quien le dio cuatro hijos, sólo dos de ellos –Lawrence y Agustine– llegaron a la edad adulta; al enviudar se casó por segunda vez con Mary Ball, perteneciente a una importante familia de Virginia, con la que tuvo seis niños más, entre ellos George, el mayor.

No obstante la ventajosa situación económica de sus padres, prósperos colonos de la región, sólo recibió una educación puramente elemental. Frecuentó las escuelas rurales de aquel tiempo. Entre los siete y los quince años estudió de modo irregular, primero con el sacristán de la iglesia local y luego con un maestro llamado Williams. Alejado de toda preocupación literaria o filosófica, el muchacho recibió una educación rudimentaria, pero sólida en el orden práctico. Igualmente asistió a la escuela de Willansbrerg, ocupándose con prelación al estudio de las matemáticas; conocía la geometría y la trigonometría, y no hablaba otro idioma que el inglés.

En el inicio de su adolescencia ya estaba bastante familiarizado con las faenas de los plantadores como para cultivar tabaco y almacenar uvas. En ese entonces, cuando tenía once años, murió su padre, en 1743, correspondiéndole en herencia la casa y las tierras de Rapphannok, pero continuó viviendo, en «Mount Vernon», al amparo de su medio hermano mayor, Lawrence, un hombre de buen carácter que, en cierto modo, fue su tutor.

A raíz de la muerte de su padre, la familia Washington decide mudarse a Ferry Farm, Condado de Stafford. En su nueva casa, George se familiarizó en un ambiente más grandioso y señorial, ya que Lawrence se casó con Anne Fairfax, una de las grandes herederas de la comarca que solía relacionarse con la alta burguesía de Virginia. Fue allí donde sus dos hermanastros –con la anuencia de su madre quien le impidió ser marinero– lo entrenaron para que se convirtiera en un agrimensor. En este proceso de formación, también influyó mucho William Fairfax, suegro de Lawrence quien, además y, a través de sus amistades en julio de 1749 le consiguió el nombramiento como inspector del Condado de Culpeper, Commonwealth, Virginia y después oficial agrimensor (asistente de una expedición para medir las tierras de lord Fairfax en el valle de Shenandoah) vínculo laboral bien retribuido que le permitió adquirir su primera hacienda en ese valle, de las muchas posesiones compradas en el occidente de Virginia. Tres años después se consagró al ejercicio de las armas, que era su inclinación.

En 1751 a Washington le correspondió acompañar a su medio hermano mayor, Lawrence –quien estaba muy enfermo de tuberculosis– a la isla de Barbados con la esperanza de que el clima le ayudaría. En este lugar George contrajo el virus de la viruela que le dejó muchas cicatrices en su rostro. Con todo, Lawrence no mejoró y se vieron obligados regresar a casa («Mount Vernon») en donde finalmente murió en julio de 1752. Por consiguiente, George a los veinte años, se convierte en cabeza de familia, pasando a ser uno de los hombres más importantes y ricos de Virginia, ya que heredó la propiedad de «Mount Vernon», un inmenso latifundio con 8.000 acres (3.237,50 Ha.) y 18 esclavos.

Washington: Masón, Político y Militar

Cuatro meses después de la muerte de su hermanastro Lawrence, George fue iniciado en noviembre 4 de 1752, a la edad de veinte años[3], en nuestros augustos misterios, en la Respetable Logia Nº4 Fredericksburg de Virginia. Luego, el 3 de marzo de 1753, se le concedió el Aumento de Salario, otorgándole el grado de Compañero y el 4 de agosto de este último año se le exaltó al grado de Maestro. Al mismo tiempo Washington fue designado por el gobernador Robert Dinwiddie como uno de los cuatro comandantes adjuntos distritales con el rango de mayor en la milicia de Virginia y un sueldo de 100 dólares anuales. Este nombramiento se le hizo debido a que su medio hermano Lawrence, ocupaba la posición de «General Adjunto», un cargo de dirección militar, que al morir, fue dividido en cuatro plazas.

De igual manera, para esa época la Masonería –que trabajaba casi exclusivamente bajo los auspicios de la Gran Logia Unida de Inglaterra– se expandía a través de las colonias estadounidenses. Sin embargo, muchas de las primeras Logias fundadas en estos territorios carecían de Carta Patente o Constitutiva, por lo que eran consideradas “irregulares” por la Gran Logia Unida de Inglaterra; no obstante, un número importante de ellas, como hecho curioso, fueron autorizadas por la Gran Logia de Irlanda, que ofrecía los «altos grados», propios de la Masonería Jacobita.

El otro medio que empleó la Gran Logia Unida de Inglaterra para extender la Francmasonería fue la milicia. Desde 1732, ya venía utilizando el ejército británico en forma de «Logias de campaña» entre los regimientos. Estas Logias eran móviles, portaban sus propios símbolos y arreos en baúles junto con los estandartes del destacamento, la vajilla de plata y otros enseres de lujo estrictamente militar.

A la postre, la Masonería americana y la del ejército inglés no tardaron en unirse en una escala sin precedentes en ese momento histórico. Los soldados “regulares” anglos trabajaron estrechamente en procedimientos y operaciones militares con los colonos “irregulares” y en este proceso los exaltaban a Grados Superiores.

Obviamente, con anterioridad, se habían llevado a cabo acciones militares en Norteamérica, donde los intereses sajones y galos habían estado enfrentados desde comienzos del s. XVIII, originando suma intranquilidad entre los colonos. El asunto se agrava cuando crece la población inglesa, por distintos motivos, en territorios estadounidenses. En efecto, la organización, las comunicaciones y el comercio se desarrollaron rápidamente. En consecuencia, se hacía necesaria la expansión hacia el valle del Ohio, oeste de Pennsylvania, lo que significaba una amenaza en los límites de la región francesa (río San Lorenzo) en Canadá, y el territorio del Mississippi, por lo que en 1753 el gobernador Dinwiddie debió encomendarle a Washington la delicada misión de realizar un reconocimiento y construir un fuerte en la zona colindante, sitio agreste, poblado de tribus feroces y atestada de cualquier cantidad de riesgos. Allí estalló inicialmente un combate de grandes proporciones. Del mismo modo los cuatro primeros años estuvieron acentuados por las pérdidas castrenses. En abril de 1755, por ejemplo, una caravana británica –integrada por militares regulares y unidades de la hueste colonial– al mando del general Edward Braddock fue emboscada por destacamentos franceses y sus aliados indios de Fort Duquesne. La tropa quedó materialmente arrasada, Braddock resultó letalmente lesionado, Washington –su asistente de campo– recibió cuatro balazos en su uniforme, logrando huir como pudo, afortunadamente fue el único oficial que no quedó herido. A este revés le siguieron muchos fracasos similares, de tal modo que fueron sucumbiendo cada uno de los fuertes británicos establecidos en lo que es actualmente el norte del estado de Nueva York. No obstante a lo aquí brevemente narrado, el 9 de julio de 1755, Washington se destacó en la ofensiva de Monongahela por su arrojo y habilidad en la toma de decisiones, aunque ésta también terminó en una desgracia para los ingleses.

En virtud de las series de derrotas, lo cual incidió anímicamente en el joven militar, éste decide retirarse a «Mount Vernon» con la invariable intención de no regresar a la milicia. Pese a su decisión, no fue posible cumplirla, ya que altas personalidades de Virginia le solicitaron hacerse cargo de los batallones, estando al mando de ellos hasta 1758, período en que de la misma forma fue elegido miembro de la Cámara de los Burgueses de Virginia; pero antes, en 1756, al declararse la «Guerra de los Siete Años», en que los franceses intentaron establecerse en el valle del Ohio, Washington fue ascendido a teniente coronel de la tropa de Virginia, a las órdenes del general Fry. Al caer éste en batalla, le substituyó como jefe supremo de las fuerzas armadas del condado. Al poco tiempo pasó a formar parte del estado mayor del general Braddock, que tenía a cargo los destacamentos regulares enviadas por Inglaterra. En esta «Guerra de los Siete Años», los ingleses resultaron vencedores, se apoderaron de Quebec y Montreal y establecieron su hegemonía en América del Norte sobre franceses y españoles.

Finalizada la «Guerra de los Siete Años», Washington le sugirió a los británicos su nombramiento como oficial de alto rango, argumentando haber cumplido con su cometido. Pese a lo planteado, no fue escuchado, por lo que dimitió y se retiró a «Mount Vernon», Virginia. Al poco tiempo, el 6 de enero de 1759, contrajo matrimonio con Martha[4] Dandridge Custis, una joven hermosa y rica viuda del coronel Daniel Parke Custis, poseedora de una de las mayores fortunas de Virginia. Tenía un gran número de esclavos y 15.000 acres (6.070,30 Ha.) de tierra. No tuvieron hijos propios, pero educaron a los que Martha tuvo en su anterior matrimonio: Jack de cuatro años y Patsy de seis, convirtiéndose en la verdadera familia de Washington.

Últimamente se ha venido dando la discusión si el Padre de la Independencia de los Estados Unidos era o no fértil. Algunos tratadistas señalan que él había quedado estéril a raíz de haber contraído la viruela; por tanto, no pudo tener descendencia directa. Sin embargo, los parientes de Venus, una joven esclava, hija de una sirvienta de Hannah Washington, la cuñada de George, afirman que ella tuvo un hijo con Washington, llamado West Ford. Los historiadores son escépticos; aseguran que no hay pruebas documentadas que sugieran tal aseveración. Empero, la actual generación decidió hablar libremente, Linda Bryant es uno de ellas y relata la historia que su madre, Elise Ford, le contó que su abuelo, George Ford, (nieto de West Ford) le había dicho: Cuando West era un niño escuchó que los esclavos hablaban sobre el parecido que tenía con George Washington. Señala además, que la tradición entre los descendientes de West Ford fue mantener la identidad de su padre en secreto, y que están dispuestos a demostrar con pruebas de ADN su progenitura.

Después de haber contraído matrimonio Washington con Martha Dandridge Custis, pasó a ser uno de los más grandes latifundistas de Virginia con un considerable aumento de su patrimonio. La pareja llena de felicidad, llevaba la vida de ricos propietarios, atentos al auge de sus granjas y a la labor destacada que ejercían en la vida social de la comarca. Todo se hacía por lo alto, la ropa se compraba en Londres, las fiestas eran ostentosas y los invitados se contaban por cientos. Pero esta vida fastuosa se vería interrumpida cuando la política autoritaria del rey Jorge III de Inglaterra principió a volverse insoportable en ultramar.

Pues bien, al firmarse en París el tratado que le ponía fin a la «Guerra de los Siete Años» el 10 de febrero de 1762, Francia renuncia a toda pretensión sobre Acadia y Nueva Escocia, igualmente lo hace Inglaterra con las posesiones en Canadá y toda la región de Luisiana, exceptuado Nueva Orleans. En virtud de esta decisión, aumenta la discordancia por cuestiones tributarias entre Londres y sus posesiones, ya que la corona planteaba que las colonias debían ayudar en el pago de los egresos causados por la guerra al haberse favorecidas de sus soluciones. Sin duda alguna, el déficit financiero ocasionado por la disputa era monumental y la única forma de sanearlo era, según Londres, crear nuevos impuestos e incrementar los que ya existían. Fue así cómo la primera nueva medida impositiva colonial de los británicos se llevó a cabo en 1764. Esta disposición se conoció como el «Acta del Azúcar». Mediante ella se colocó aranceles a la madera, alimentos, ron y melaza. Después el parlamento inglés, en marzo de 1765, impuso el uso de papel sellado para todo tipo de contratos. Al año siguiente gravó una serie de reivindicaciones administrativas y económicas que poseían los colonos como los derechos aduaneros sobre el papel, el vidrio, el plomo y el té. Efectivamente, las medidas tomadas originaron la molestia de los americanos, en especial a los comerciantes, que comenzaron a organizarse e hicieron alianzas para no consumir productos británicos. Además objetaban la forma de recaudo de los impuestos, pues los agentes aduaneros de Inglaterra tenían poderes casi ilimitados, podían investigar, incautar sin notificación ni orden judicial y allanar cualquier lugar en busca de bienes importados que estuvieran violando el Acta. Posteriormente, en 1770, los británicos cedieron eliminando todos los aranceles excepto el del té. Sin embargo, el fervor revolucionario era tan fuerte que no pudo detenerse. El resultado fue el derramamiento de sangre. El 5 de Marzo de ese año, la “Masacre de Boston” sucedió, en la cual las tropas anglas dispararon a un grupo matando a cinco personas.

Las presiones continuaron en aumento y se formaron más grupos secretos revolucionarios, entre ellos «Los Hijos de la Libertad». Los ingleses todavía no eliminaban el impuesto al té. El 16 de diciembre de 1773, tres años después de la “Masacre de Boston”, como protesta por los altos impuestos, un grupo de colonialistas disfrazados de indios pieles rojas, abordaron tres barcos mercantes británicos, fondeados en el puerto de Boston, el “Dartsmouth”, el “Eleonor” y el “Beever” y arrojaron al agua 342 bultos de té. A las nueve de la noche todo el cargamento flotaba en las aguas del puerto. Este suceso histórico es conocido como «Boston Tea Party».

Es de gran valor señalar que el acontecimiento de «la fiesta del té de Boston» fue planeado y ejecutado por miembros de la Logia Saint Andrew[5]. Ellos se reunían en una taberna de Boston llamada “Green Dragon”. Claro está que no todos los miembros de la Logia apoyaban el movimiento patriótico; pero los líderes Masones como Paul Revere, John Hancock, Samuel Adams y Joseph Warren trazaron el plan que inició las gestas revolucionarias independentistas que rápidamente se expandió al resto de América en los siguientes 50 años. Casi doce años después llegó la revolución francesa que generó el republicanismo y divulgó los axiomas Masónicos de «Libertad», «Igualdad» y «Fraternidad», cuyo eco atravesó el Atlántico llegando a exaltar, fuerte e irresistiblemente, el espíritu revolucionario en las colonias españolas de América.

Al final, este acto de rebelión causó que el parlamento inglés promulgara sanciones comerciales contra los colonialistas. Los castigos lo que hicieron fue incitar más la rebelión. Pese a su prudencia, tolerancia y conocimiento en asuntos políticos, Washington resolvió enfrentarse sin reservas a la política colonial británica. En 1774 asistió al Primer Congreso Continental en Filadelfia convocado por un grupo de líderes coloniales para protestar contra las acciones británicas y llamar a la desobediencia civil.

En el mes de Marzo de 1775, Patrick Henry pronunció su famoso discurso: «Dame libertad o dame la muerte», en una Convención en Virginia. En menos de un mes desde este discurso, se puso en camino la revolución americana con la “Batalla de Concord”, donde una milicia colonial organizada llamada “En Estado de Alerta” sufrió ocho bajas mientras ocasionaron 273 a los británicos. En Junio de ese mismo año, George Washington asiste al Segundo Congreso Continental en Filadelfia y fue nombrado Comandante en Jefe del nuevo y harapiento ejército continental, creado de la nada y en presencia del enemigo. Al llegar a Boston se encontró con una multitud de sublevados formada por más de quince mil hombres mal armados, los que debió organizar. Como resultado de su experiencia castrense, creó el ejército de Massachusetts, con el cual ocupó Boston y expulsó a los anglosajones del general William Howe de Nueva Inglaterra en 1776. En virtud de que Londres seguía enviando tropas, entonces los americanos proclamaron su independencia el 4 de julio de ese año. La Declaración de Independencia fue redactada por Thomas Jefferson y aprobada el 10 de junio por el Congreso General de Filadelfia, que había promulgado además la unión de las 13 colonias. El nombre de «Estados Unidos de América» de la nueva república fue propuesto por Thomas Paine y fue usado por primera vez en la Declaración de Independencia.

Más tarde George Washington emprendió la difícil travesía del río Delaware, tras la cual venció a los británicos en Princeton y Trenton. Después sufrió algunos reveses, como el de Brandywine, que lo obligaron a refugiarse en Valley Forge y reorganizar el ejército en condiciones precarias durante el invierno de 1777 y 1778, en lo que se considera su mejor acción militar. Igualmente en este último año, el gobierno francés vio en el conflicto la oportunidad de vengar la derrota de la «Guerra de los Siete Años» y, en 1778, firmó una alianza con los Estados Unidos, a la que se sumó al año siguiente Carlos III de España.

El apoyo de los destacamentos franceses fue tan efectivo que en la primavera de 1778, Washington pudo recuperar Filadelfia, sitiar Nueva York y dirigirse al sur para cortar el avance de lord Cornwallis, que iba al frente de once mil hombres, el grueso de las tropas inglesas. El 19 de octubre de 1781 éste se vio obligado a rendirse, luego de caer prisionero con su ejército. Este sometimiento provocó la definitiva victoria de los colonos y el reconocimiento de la independencia por parte de Inglaterra, antes de firmarse la paz en Versalles, el 20 de enero de 1783.

Es conveniente resaltar que al lado de Washington combatieron muchos Francmasones, entre ellos Benjamín Franklin, Alexander Hamilton, Richard Montgomery, Henry Knox, James Madinson y Patrick Henry. Los revolucionarios que también eran Grandes Maestros, incluían a Paul Revere, John Hancock y James Clinton. De acuerdo a un artículo del Coronel La Von P. Linn, titulado: “La Francmasonería y la Defensa Nacional, 1754-1799” existe un estimado de 14.000 oficiales de todos los rangos del Ejército Continental y un quinto (1/5), o sea 2.018 de ellos eran Francmasones. Esto representaba un total de 218 Logias. Un centenar de esos oficiales eran generales. Además, Europa proporcionó a los americanos del norte dos Masones adicionales de importancia. Desde Alemania llegó el Baron von Steuben[6], quien personalmente convirtió las tropas haraposas de Washington en la semblanza de un ejército de batalla. El segundo europeo fue Marie-Joseph Paul Yves Roch Gilbert du Motier, conocido como el Marqués de La Fayette o Lafayette[7] .

Por otra parte, la postura federalista, protectora del establecimiento de un poder central eficiente que preservara los intereses americanos en el exterior y equilibrara las tendencias partidistas de los territorios, supo conciliarse con la de los republicanos, partidarios de conservar la independencia política y económica de los estados. El acuerdo entre ambos grupos fue expresado por la Constitución del 17 de septiembre de 1787, la primera Carta Constitucional escrita que reguló la forma de gobierno de un país. Una vez más, la capacidad de organización y dirigente de Washington hicieron que las esperanzas fueran puestas en él, y el Congreso lo eligió como primer presidente de los Estados Unidos de América del Norte el 30 de abril de 1789.

En 1793 fue reelegido para un segundo mandato; sin embargo, dudó en aceptarlo y Jefferson lo convenció para que lo asumiera nuevamente. En esta segunda fase de gobierno tuvo que enfrentar serias dificultades, como la suscitada en el Oeste por la oposición a los impuestos sobre el aguardiente, que causó en 1794 una sublevación, conocida como Whiskey Rebellion, la cual fue reprimida por las tropas enviadas por orden del presidente. El 25 de junio del mismo año firmó el Tratado Jay, un acuerdo comercial con Inglaterra y al conocerse los términos del convenio, suscitó firmes polémicas en el parlamento; con todo, en 1797 fue reelegido por tercera vez para ocupar el poder, pero en esta oportunidad se negó radicalmente, alegando que quería volver con su familia y a la paz de la vida privada.

Después de retirarse de la presidencia en marzo de 1797, Washington regresó a «Mount Vernon». Se dedicó a la agricultura y, en ese año, construyó una destilería de 2.250 metros cuadrados, que fue uno de las más grandes de la nueva república. Dos años más tarde, produjo 11.000 litros de whisky por un valor de $ 7.500.

En 1798, el presidente John Adams lo nombró teniente general del Ejército de EE. UU. ante el peligro inminente de una guerra con Francia. Al año siguiente regresó nuevamente a «Mount Vernon». El 12 de diciembre de 1799, debió pasar revista a sus plantaciones a caballo en medio de un crudo invierno con nieve, granizo y más tarde lluvia helada. Por la noche se sentó a cenar sin cambiar su ropa mojada. Al amanecer, se despertó con un fuerte resfriado, fiebre y una afección inflamatoria de la faringe denominada angina que se convirtió en laringitis aguda y neumonía.

Washington murió en la noche del 14 de diciembre de 1799, en su casa, en presencia de su familia, del Dr. James Craik, uno de sus amigos más cercanos, y Tobias Lear, su secretario personal.

Médicos modernos piensan que Washington murió como consecuencia de una epiglotitis, o sea, la inflamación del cartílago que cubre la glotis (epiglotis), desde que fue desangrado como parte del tratamiento, una combinación de shock por la pérdida de cinco litros de sangre, así como la asfixia y deshidratación. Sus restos fueron enterrados en Monte Vernon.
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[1] Mackey Gallatin, Albert. ENCICLOPEDIA DE LA FRANCMASONERÍA. Tomo IV. Editorial Grijalbo, S. A. México. Marzo de 1984. P. 1.608.

[2] De acuerdo al antiguo calendario, que en ese entonces regía en las colonias de América del Norte y en Inglaterra, la fecha de nacimiento fue el 11 de febrero de 1731, pero según el nuevo calendario gregoriano, que acababa de ser introducido en septiembre de 1752, le corresponde el 22 de febrero de 1732.

[3] Ha sido costumbre en nuestra Institución que el recipiendario al iniciarse en cualquier país, debe tener la mayoría de edad civil. En esa época, en EE. UU. lo era a los veintiuno y la Constitución y Reglamentos de las Logias así lo contemplan. Por tanto, a George Washington se le debió conceder una dispensa para iniciarlo a los veinte años.

[4] Martha Dandridge nació en la finca de sus padres Chestnut Grove, nuevo condado de Kent, el 2 de junio de 1731. Hija de ingleses emigrantes: John Dandridge, el mayor plantador de Virginia y Frances Jones, descendiente de franceses. A pesar de tener un temperamento acelerado, era dulce y aplacable en su trato y de buenos modales, siempre vestida con escrupuloso respeto a los requisitos de la mejor moda de la época, y fue en todos los aspectos un miembro brillante de los círculos sociales. A los 17 años se casó con Daniel Parke Custis, hijo de uno de los consejeros del rey en Virginia. Tuvieron cuatro hijos: Daniel (1751-1754) y Frances (1753-1757), murieron en la infancia, los otros dos hijos, John (“Jack”) Parke Custis (1754-1781) y Martha (“Patsy”) Parke Custis (1756-1773) sobrevivieron a la edad adulta. “Jack” sirvió como ayudante a Washington durante el sitio de Yorktown en 1781 y murió de tifo, en octubre de ese año, cuando prestaba el servicio militar. Tuvo dos hijos, Martha y Eleonor, a quienes Washington adoptó como propios. “Patsy” murió durante una crisis epiléptica. Martha Dandridge murió en Mount Vernon, Virginia, el 22 de mayo de 1802.

[5] Lennhoff, Eugen. “Los Masones ante la Historia”, Editorial Diana S. A., México, 1983, p. 206.

[6] Von Steuben fue un Francmasón alemán que sirvió en el ejército prusiano como ayuda de campo de Federico el Grande. Fue el encargado en el año 1763 de la desmovilización prusiana después de la «Guerra de los Siete Años».

[7] Lafayette era un noble caballero francés muy rico, que había sido inspirado por las noticias sobre la revolución americana mientras servía al ejército francés en Europa; así que, se embarcó para América a fin de ayudar a la causa revolucionaria. En 1778, durante su servicio con el Ejército Continental, La Fayette se hizo Francmasón.


Referencias Bibliográficas

1. Baigent, Michael y Leigh Richard. MASONES Y TEMPLARIOS –sus vínculos ocultos–. Ediciones Martínez Roca, S. A. Madrid, España. Abril de 2005.

2. Blaschke, Jorge y Río, Santiago. LA VERDADERA HISTORIA DE LOS MASONES. Editorial Planeta, S. A. Primera edición. Barcelona, España. Enero de 2006.

3. Carnicelli, Américo. LA MASONERÍA EN LA INDEPENDENCIA DE AMÉRICA. Tomo I. Cooperativa Nacional de Artes Gráficas Ltda. Bogotá. Agosto 30 de 1970.

4. Estados Unidos. HISTORIA UNIVERSAL COMPARADA. Tomo VI. Editorial Plaza & Janes. Segunda edición. Barcelona, España. Enero 1977.

5. Frau Abrines, Lorenzo. DICCIONARIO ENCICLOPÉDICO DE LA MASONERÍA. Tomos III y IV. Editorial del Valle de México, S. A. México. 1976.

6. Gallatin Mackey, Albert. ENCICLOPEDIA DE LA FRANCMASONERÍA. Tomo IV. Editorial Grijalbo, S. A. México. 1981.

7. George Washington. En Internet:
http://www.biografias.es/famosos/george-washington.html

8. George Washington. En Internet:
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/w/washington.htm

9. George Washington. En Internet: http://en.wikipedia.org/wiki/George_Washington

10. George Washington. En Internet: http://www.logiawashington.org.ar/006.htm

11. George Washington. En Internet:
http://pluricellular.blogcindario.com/2009/01/00075-george-washington-1.html

12. Historia de América –VIDA INDEPENDIENTE DE ESTADOS UNIDOS. Enciclopedia Práctica Jackson. Octava edición. Tomo 8. México. Noviembre 1966.

13. Hoenigsberg Racedo, Julio. INFLUENCIA REVOLUCIONARIA DE LA MASONERÍA EN EUROPA Y AMÉRICA. Primera edición. Editorial A. B. C. Bogotá. 1944.

14. Lennhoff, Eugen. LOS MASONES ANTE LA HISTORIA, Editorial Diana S. A., México, 1983.

15. Ridley, Jasper. LOS MASONES. Ediciones B. Argentina S: A. Segunda edición. Buenos Aires. Junio de 2002.
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Los Mandiles de Washington

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Por: Mario Morales Charris 33º
Past Ven.·. Maest.·. Resp.·. Log.·. Lealtad No. 7
Ex Gran Maestro de la Muy Resp.·. Gr.·. Log.·. del Norte de Colombia
Pres.·. Gran Tribunal Soberano «Lázaro Bravo Maury», Cám.·. 31°



Se sabe que el joven francés Marie Joseph Paul Yves Roch Gilbert du Motier, mas conocido como el marqués de La Fayette o Lafayette, nació el 6 de septiembre de 1757 en Auvergne, Francia. Ingresó a las filas del ejército real de su país en 1772. Para esta época, contaba con 15 años de edad, y poseía el grado de Capitán de Dragones, cuando las colonias inglesas de Norteamérica declaran su independencia.

En abril de 1777, decide viajar por la causa libertadora hacia los asentamientos británicos en América del Norte, lo cual el rey Luis XVI se lo prohibió. Haciendo caso omiso a tal mandato, compró un barco con su propio dinero y, con una tripulación de aventureros, navegó de todos modos hacia América. Arribó a Carolina del Sur el 14 de junio del año señalado.

Luego de un viaje de diez meses, llega a Filadelfia, sede del gobierno colonial para luchar en la revolución contra los británicos. Se unió a las filas como general de división al mando de George Washington, ganándose la confianza del Libertador. Sirvió con distinción a las fuerzas de Estados Unidos en varias victorias. Asimismo, convenció al gobierno francés para enviar ayuda a los estadounidenses, convirtiéndose en gran artífice del intercambio y correspondencia Masónica entre Norte América y Francia.

Tanto fue la amistad que lo unió a Washington, que éste lo consideraba como un hijo. A su vez, Lafayette lo puso de padrino de su primogénito George Washington Lafayette.

Los lazos fraternales fueron tan intensos, que la esposa del marqués Lafayette, Marie Adrienne Françoise le obsequió, en agosto de 1784, al general George Washington, un mandil Masónico bordado a mano por ella, el cual utilizó cuando se juramentó como presidente de las trece colonias y el 18 de septiembre de 1793, en la colocación de la primera piedra de fundación del capitolio norteamericano.


El mandil fue presentado, el 26 de octubre de 1816, a la Sociedad Washington de Benevolencia de Penssylvania con una pequeña nota –enmarcada actualmente con el mandil– la cual dice: “A la sociedad benévola de Washington. Los herederos del General Washington, convencidos por los sentimientos más profundos con respecto a la noble institución; que tienen el honor de tratar, con mucho beneplácito les presentamos la reliquia que se incluye del reverenciado y lamentado Padre de su País”. Se persuaden de que el mandil fue poseído una vez por el Hermano Washington, a quien el pueblo de Filadelfia estará siempre encantado de honrar.


En 1829, la sociedad benévola de Washington decidió donar el mandil a la Gran Logia de Pennsylvania, y desde entonces ha estado en su posesión, con el conocimiento de que se trata de una querida parte de la historia norteamericana y Masónica.



El otro mandil fue elaborado en Francia y se trata de un regalo hecho por Elkanah Watson y de su socio M. Cassoul, de Nantes, Francia, al Hermano George Washington; ellos fueron agentes confidenciales del gobierno norteamericano en el exterior durante el período revolucionario. Watson, en el libro Men and Times of the Revolution, dice:

"Deseándole ofrecer un reconocimiento a nuestro Querido Hermano Washington, contrató junto con mi amigo M. Cossoul a unas monjas de los conventos en Nantes para que elaboraran algunos ornamentos Masónicos elegantes, y les entregó un proyecto para combinar las banderas americana y francesa en el mandil. Su elaboración tuvo un estilo superior y costoso".


Actualmente se encuentra exhibido en un marco sellado en Logia Alexandria Washington No. 22 en Alexandria, Virginia.
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Ancestros de George Washington

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Por: Mario Morales Charris 33º
Past Ven.·. Maest.·. Resp.·. Log.·. Lealtad No. 7
Ex Gran Maestro de la Muy Resp.·. Gr.·. Log.·. del Norte de Colombia

Pres.·. Gran Tribunal Soberano «Lázaro Bravo Maury», Cám.·. 31°


Con el presente ensayo nos proponemos dar a conocer, de forma resumida, la ascendencia familiar de nuestro Querido Hermano George Washington, primer presidente de los Estados Unidos de América del Norte. No fue nada fácil lograrlo debido a que la mayoría de libros de historia, enciclopedias, etc., no dan esta información, sólo se circunscriben en narrar su biografía y la gestión político-militar para que el país del norte adquiriera su independencia del Reino Unido de la Gran Bretaña. Y, los libros, diccionarios, enciclopedias, etc., de Masonería, restringen sus investigaciones y datos especializados a nuestra Institución. Por tanto, debimos recurrir a otros medios como el de la Internet,

En todo caso la Internet fue un instrumento fundamental. Sin embargo, por razones obvias, la publicación la presentan las distintas páginas Webs en inglés. A pesar de aplicarles los diferentes traductores, la información obtenida es completamente literal, lo cual en muchas ocasiones ditorsiona la traducción. No obstante, contribuye a darnos la idea de lo esencial.

Es importante señalar que esta investigación se limita únicamente al estudio del apellido Washington.

La historia conocida de la familia de Washington (antiguamente Wessington) se remonta a la década de 1100. Robert I[1] Washington, quien murió en 1324, fue el progenitor de la rama de la familia que residió en Sulgrave Manor[2].

Tiempo después encontramos a un terrateniente en escala considerable, otro Robert Washington, Robert II, fallecido en 1483. Los investigadores piensan que éste hizo la torre de la iglesia de Warton[3], construida a finales del siglo XV. Al morir, las principales propiedades las heredó su hijo mayor, John I Washington, que nació en 1453 y murió en 1499. A través de él la línea continúa en Warton hasta 1823, cuando el Rev. Thomas Washington –Vicario de Warton durante veinticuatro años– murió sin dejar descendencia. Sin embargo, Robert II tuvo un segundo hijo, Robert III, abuelo de Lawrence I Washington[4], nacido alrededor de 1500, quien fue el constructor de Sulgrave.

Es de aclarar que Robert III se casó tres veces: primero con Elizabeth Westfield, después con Jane Whittington y por último con Agnes o Anne Bateman. El hijo mayor de su primer matrimonio fue otro John Washington, John II, quien contrajo matrimonio con Margaret Kytson, hija de Robert Kytson de Warton, quienes tuvieron seis hijos, el mayor de ellos es Lawrence I Washington.

Los testimonios del Ducado de Lancaster revelan que el 26 de julio 1529 Lawrence I se desempeñaba como alguacil[5] en Warton, un cargo hereditario en su familia.

Más tarde, a través de su madre y las relaciones de su empleo, Lawrence I fue vinculado, siendo muy joven, a dos familias de importancia en el mundo político y económico de la Inglaterra de los Tudor[6]. Este nexo con la casa real le sirvió para ocupar cargos significativos, v. gr., fue elegido miembro de la Corporación Municipal Northampton. Igualmente se desempeñó dos veces como alcalde de esa localidad en 1532 y después en 1545. También fue concejal de justicia y de paz en varias ocasiones. Aún más, Lawrence I se convirtió en uno de los hombres terratenientes más ricos que se beneficiaron de la necesidad de la corona al vender tierras confiscadas a los monasterios cuando fueron disueltos como parte de haberse separado de la Iglesia Católica Romana. Todo lo cual nos indica que mantuvo una presencia activa en Northampton, después de haber construido Sulgrave Manor.

Este caballero contrajo matrimonio, antes del 24 de marzo de 1529-30[7], con una viuda de Northampton, Elizabeth Gough, cuyo marido anterior, William, había sido un próspero Mercer[8] y alguacil de la ciudad. La pareja no tuvo hijos, y al morir Elizabeth, contrajo segundas nupcias con (otra viuda rica, poco antes del 4 de febrero 1537 / 8) Amy Tomson, hija de Robert Pargiter de Greatworth y viuda del señor John Tomson de Sulgrave, con quien tuvo once hijos: cuatro varones y siete mujeres.

El hijo mayor de Lawrence I, Robert IV Washington[9] (1544 – 1620) heredó Sulgrave Manor cuando murió su padre en 1584. Casado dos veces, primero, en 1565 con Elizabeth Light[10], los cuales tuvieron nueve hijos; al morir Elizabeth en 1599, contrajo matrimonio con Anne Fisher. De esta unión le nacieron seis hijos más.

Lawrence II Washington[11] –hijo mayor de de Robert IV y Elizabeth Ligth– debidamente autorizado por su padre, posiblemente como resultado de su segundo matrimonio y para proteger los intereses de su familia, vende el 20 de agosto de 1605 parte de la finca de Sulgrave (la casa linajuda, los dominios de las tierras feudales, Winchcombe, Buckinghamshire y la rectoría de Stuchbury) a Thomas Atkins, conservando sólo la casa y siete acres de tierra, equivalente a 2,8 hectáreas. Después vendió la reversión del resto[12] el 1 de marzo de 1610 a su primo Lawrence Makepeace, hijo de la hermana de Robert IV, Mary y Abel Makepeace. La operación comercial se realizó condicionada en que Robert IV y sus herederos se mantenían en posesión de la mansión de Stuchbury hasta 1646, los pueblos bajos de Boddington hasta 1636 y Radway hasta 1654.

Es interesante señalar que Lawrence II nació alrededor de 1568 en Sulgrave Manor. Se casó con Margaret Butler[13], el 3 de agosto 1588 en Aston le Walls, Northamptonshire, Inglaterra. Murió primero que su padre el 13 de diciembre 1616 en Brington, Northamptonshire, Inglaterra. Su único hijo, el reverendo Lawrence III Washington[14] se convirtió en heredero de Robert IV.

Luego de la muerte de Robert IV en 1620, su segunda esposa, Anne Fisher, siguió viviendo en su casa Sulgrave Manor hasta 1625.

En cuanto al reverendo Lawrence III, éste nació en 1602 en Sulgrave Manor. Acto seguido a su grado en la Universidad de Oxford, fue elegido miembro de dicha universidad, alcanzando el mayor poder de la iglesia. Fue rector de Purleigh y perdió esta posición durante la guerra civil cuando Essex estuvo bajo el gobierno del parlamento, donde se le acusó como “maligno realista” y “borracho a menudo” no sólo por frecuentar las tabernas sino también por animar a otros a que lo hicieran; por esta razón fue expulsado de Purleigh y se trasladó a la rectoría de Braxted, a las afueras orientales de Witham en 1643; asimismo fue becario y Profesor de Brasenose College; también fue canciller de Oxford con el rey Charles I.

Contrajo matrimonio con Amphilis Twigden[15], en diciembre de 1633 en Purleigh, Essex, Inglaterra. De esta unión le nacieron seis hijos: el coronel John I Washington[16], Lawrence IV[17], William[18] Elizabeth[19], Margaret y Martha.

Murió el 21 de enero 1653, en la absoluta pobreza después de haber sido expulsado de Purleigh. Está enterrado en el cementerio de «Todos los Santos» en las inmediaciones de la ciudad de Maldon.

Con relación al coronel John I Washington, probablemente nació en Purleigh o en Tring en 1633. Emigró a la colonia de Virginia en 1656, acompañado de su hermano Lawrence IV y otro descendiente, James Washington[20]. Su hermana Martha lo hizo más tarde. En su viaje de regreso a principios de 1657, su barco encalló y se hundió por una tormenta de invierno en el río Potomac, pero después fue puesto a flote y decidió quedarse en Virginia, alojándose en la casa del coronel Nathaniel Pope[21], a la edad de veinticinco años. Se enamoró de la hija de su anfitrión, Anne Pope y se casó en 1658. El regalo de boda que le hizo su suegro fue de 700 acres (283 hectáreas) en Mattox Creek, condado de Westmoreland, Virginia. La pareja tuvo cinco hijos, dos de los cuales murieron muy jóvenes. Su hijo mayor Lawrence V Washington[22], nació a finales de septiembre de 1659, en la finca de su padre en Bridges Creek, luego le siguieron John II[23] y Anne[24].

El coronel John I Washington se convirtió en un exitoso plantador, lo que le llevó a adquirir otras 1.000 hectáreas. Le sirvió a Virginia en la Cámara de los Ciudadanos. Durante los acontecimientos que condujeron a la rebelión de Bacon fue nombrado coronel de la milicia de Virginia y dirigió una compañía de hombres para apoyar a un grupo de Maryland. En esta actividad fueron asesinados seis jefes de diversas tribus, por lo que fue muy criticado.

Ann Pope murió en momentos en que John I se encontraba al frente de la expedición militar. Afortunadamente sus hijos ya eran unos adolescentes y fueron capaces de cuidar de sí mismos. John I se volvió a casar por segunda vez con Ann Gerrad, dos años después de la muerte de Ann Pope, pero poco después volvió a quedar viudo. Luego se casó por tercera vez con la hermana de Ann Gerrad, Frances Gerrad, tal vez sólo un año después del breve matrimonio con Ann Gerrad.

John I Washington murió en Creek en 1677, a la edad de 46 años. En el momento de su muerte era propietario de más de 8.500 hectáreas. Fue enterrado junto con su esposa en el lugar de nacimiento de George Washington, el Monumento Nacional en Colonial Beach, Virginia, condado de Westmoreland.

Referente a Lawrence V Washington, abuelo de George Washington, podemos señalar que recibió los beneficios de la primogenatura, fue enviado a Inglaterra para ser educado, donde se formó como abogado. A pesar de haber heredado dos haciendas a la muerte de su padre (1.850 acres [748,7 Ha.] en Mattox Creek y 2.500 acres [1.011,7 Ha.] en la Little Hunting Creek, que más tarde su nieto Lawrence VII la denominaría «Mount Vernon») fue poca la atención que le prestó a estas propiedades, pues se dedicó más a la política y a su profesión como abogado.

En 1688, Lawrence V se casó con Mildred I Warner[25], hija del coronel Agustine Warner, perteneciente a una familia rica del condado Gloucester, Virginia. De este matrimonio nacieron tres hijos: John III[26], Agustine I[27] y Mildred II[28]. Lamentablemente Lawrence V murió en febrero del mismo año en que nació su hija, a la edad de 38 años.

Después de su muerte, Mildred I Warner contrajo segundas nupcias con George Gale y la familia se mudó a Whitehaven, Inglaterra. Mildred I feneció el 30 de enero de 1701, y en 1704 sus hijos regresaron a Virginia porque un primo de Lawrence V, John Washington solicitó la custodia de ellos.

Con respecto a Agustine I, padre del futuro presidente de EE. UU., George Washington, es preciso manifestar que éste nació en Westmoreland, Virginia, en el año 1694. Tenía solamente cuatro años cuando su padre pereció. Su madre Mildred I, como lo acabamos de ver, falleció en 1701, tres años después de la muerte de su padre Lawrence V, o sea que Agustine I, a los 8 años ya había sufrido la pérdida de ambos padres. Heredó unos 1.000 acres (404,7 Ha.) en Bridges Creek en el condado de Westmoreland, y su hermana Mildred II heredó lo que se denomina la propiedad Little Hunting Creek.

Al llegar a a la mayoría de edad (21 años en 1715) se casó con Jane Butler[29], una huérfana que había heredado unos 640 acres (259 Ha.) de su padre. La joven pareja se estableció en la propiedad de la Quebrada Bridges. Tuvieron cuatro hijos, sólo dos de los cuales (Lawrence VI y Agustine II[30]) llegaron a la edad adulta.

Ocupémonos un poco de Lawrence VI Washington (1718-1752), medio hermano de George Washington, presidente de EE. UU. Éste contrajo matrimonio en julio de 1743 con Anne Fairfax (1728-1761), hija del coronel William Fairfax de Belvoir, quien además era un agente de tierras a las órdenes de su primo, Thomas Fairfax. Los nuevos esposos Washington-Fairfax tuvieron cuatro hijos, pero ninguno llegó a la edad adulta.

Lawrence VI fue un soldado y terrateniente destacado en la colonia de Virginia, miembro fundador de la Compañía de Ohio de Virginia, y miembro de la legislatura colonial que representó el condado de Fairfax. En 1749 era el principal responsable de velar por el establecimiento de la ciudad de Alexandria, Virginia, en las orillas del río Potomac.

Lawrence VI fue uno de los pocos sobrevivientes que participó en expediciones contra el imperio español en América, estando presente en los ataques contra Cuba y Panamá. También participó en el asalto contra Cartagena, entre marzo y abril de 1741 lo que resultó un desastre, pues más de la mitad de la fuerza británica se agrava y murió a causa de enfermedades tropicales, principalmente de fiebre amarilla. En este lugar combatió contra Blas de Lezo en la derrota inglesa de la «Guerra de la Oreja de Jenkins». Cartagena de Indias fue sitiada por el almirante británico Edward Vernon, y en su honor Lawrence VI decidió llamar «Mount Vernon» a la plantación que tenía en Virginia. Murió de tuberculosis en su casa «Mount Vernon», en julio de 1752. Su viuda se volvió a casar con un miembro de la familia Lee.

Ahora continuemos ocupándonos de Agustine I. En 1718 compró un terreno en Popes Creek, colindante con su antigua propiedad en Bridges Creek. Más tarde, alrededor de 1726, construyó una nueva casa en este lugar y le dio por nombre «Wakefield». Después, en el mismo año, compró la propiedad de Little Hunting Creek de su hermana Mildred II.

Además de supervisor y capataz de mano de obra esclava como plantador de tabaco, Agustine I fue un miembro activo de Iglesia Anglicana y en la política local. Se desempeñó en varias ocasiones como juez de paz y como sheriff del condado.

Más tarde, a la muerte prematura de su esposa Jane Butler en 1729, contrajo segundas nupcias el 6 de marzo de 1731 con Mary Ball, nacida en Lively, Lancaster County, Virginia en 1708. Única hija de José Ball[31] y su segunda esposa, la viuda Mary Johnson, de soltera Mary Bennett[32]. Quedó huérfana de padre a los tres años y a partir de los doce, de conformidad con los términos del testamento de su madre, permaneció bajo la tutela del abogado George Eskridge.

Agustine I y Mary Ball tuvieron seis hijos: George[33], Betty[34], Samuel[35], John Agustine[36], Charles[37] y Mildred[38] quien no llegó a la edad adulta.

Agustine I murió en 1743. A diferencia de la mayoría de las viudas en Virginia, Mary Ball Washington nunca se volvió a casar. Pues vivió para ver a su hijo, George Washington, posesionándose como primer presidente de EE. UU. el 30 de abril de 1789. Cuatro meses después (25 de agosto 1789) Mary moría de cáncer. Fue enterrada en la plantación de Lewis. La tradición cuenta que este era su lugar favorito de descanso para la lectura, la oración, y meditación.
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[1] Este Robert, lo hemos designado como Robert I para no confundirlo con los subsiguientes; asimismo lo haremos con los nombres John, Lawrence, Agustine y otros que son muy repetitivos.

[2] Sulgrave Manor: fue el hogar de los ancestros de George Washington, quienes la habitaron entre 1500 a 1539. La casa está ubicada en Sulgrave, un pueblo y parroquia civil, cerca de Banbury, al sur de Northamptonshire, no lejos del río Wear y a 8 Km. del norte de Brackley, Inglaterra. Hoy en día Sulgrave Manor se ha convertido en un símbolo histórico, abierto al público desde 1921 por el marqués de Cambridge, hermano del rey, en señal de amistad y buena voluntad entre los pueblos británico y estadounidense. La iniciativa para la compra de Sulgrave Manor vino del «Comité Centenario de Paz », creado en 1911 para elaborar una conmemoración del centenario del Tratado de Gante (1814), que había establecido la paz entre los EE.UU. y Gran Bretaña.

[3] Warton: población de la región o condado de Lancashire no metropolitano, de origen histórico en el noroeste de Inglaterra, junto al mar de Irlanda. Toma su nombre de la ciudad de Lancaster, y es a veces conocido como el Condado de Lancaster. Su capital es Lancaster, y su ciudad más grande es Preston. Se cree que fue fundado alrededor del siglo XII. Se destacó durante la Revolución Industrial.

[4] Lawrence I Washington, fue el bisabuelo del tatarabuelo paterno de George Washington, presidente de EE. UU.

[5] Alguacil: un funcionario administrativo superior de la finca, la supervisión de la tierra y las granjas.

[6] La dinastía Tudor o Casa de Tudor (Tudur en galés) remonta su origen al s. XIII. Comprende una serie de cinco monarcas de origen galés que reinaron sobre el reino de Inglaterra y el reino de Irlanda. Los tres principales monarcas, Enrique VII, Enrique VIII e Isabel I orquestaron la transformación del reino de Inglaterra de un patio trasero europeo siempre sumergido en la Edad Media, en un Estado poderoso del Renacimiento que iba a dominar gran parte del mundo conocido. La Casa de Tudor gobernó el reino de Inglaterra desde 1485 hasta 1603. Su historia está entrelazada con los acontecimientos más importantes y dramáticos de la historia moderna de Europa y del mundo, pues bajo su gobierno comenzó la exploración inglesa de América. Por ello se la considera como la familia real inglesa más famosa y controvertida. Son un ejemplo de las monarquías autoritarias con las que compitieron y se relacionaron en el escenario de la Europa Occidental del antiguo régimen.

[7] Hasta 1752, el año nuevo se inició el 25 de marzo, lo que equivale en el calendario gregoriano enero-marzo de 1530-31.

[8] Mercer: comerciante de telas.

[9] Robert IV Washington: Abuelo del tatarabuelo paterno de George Washington, presidente de EE. UU. nació alrededor de 1544 en Sulgrave Northamptonshire, Inglaterra. Murió el 10 de marzo alrededor de 1620 en Boddington, Northamptonshire, Inglaterra. Sus restos fueron sepultados en la iglesia de Sulgrave.

[10] Elizabeth Light: Era la hija heredera de Walter Light de Radway Grange, Warwickshire, y Úrsula Woodford.

[11] Lawrence II: Padre del tatarabuelo paterno de George Washington, presidente de EE. UU.

[12] "Reversión del resto" significa el derecho a tomar la tierra y la casa a la muerte del titular actual, poniendo a Lawrence Makepeace en la posición de heredero en lo que se refiere a la casa y siete hectáreas.

[13] Margaret: hija de William Butler y Margaret Greeke. Murió el 16 de marzo de 1652. Fue enterrada en el East Haddon, Northamptonshire.

[14] El reverendo Lawrence III: Tatarabuelo paterno de George Washington, presidente de EE. UU.

[15] Amphilis Twigden: Fue bautizada el 2 de febrero 1601 en Spratton, Northamptonshire, Inglaterra. Hija de John Twigden y Anne Dickens. Murió el 19 de enero de 1654. Sus restos reposan en Tring, Hertfordshire, Inglaterra.

[16] El coronel John I Washington: Bisabuelo paterno de George Washington, presidente de EE. UU.

[17] Lawrence IV: Bautizado en Tring el 23 de junio 1635.

[18] William: Bautizado en Tring 14 de octubre 1641.

[19] Elizabeth: bautizado en Tring 17 de agosto 1636.

[20] James Washington: Regresó a Inglaterra y poco después emigró a Rotterdam, Holanda. Allí se casó con una holandesa llamada Clara van der Lauen. Uno de sus hijos, el Barón Jakob von Washington, nacido en la Haya, Países Bajos (26 de enero 1778 - 5 de abril de 1848) fue un teniente general del ejército de Baviera.

[21] Nathaniel Pope: Fue un hombre muy rico en Maryland.

[22] Lawrence V Washington: Abuelo paterno de George Washington, presidente de EE. UU.

[23] John II (1660-1698).

[24] Anne (1660-1697).

[25] Mildred I Warner: abuela paterna de George Washington, presidente de EE. UU.

[26] John III (1692-1746).

[27] Agustine I Washington: padre de George Washington, presidente de EE. UU.

[28] Mildred II (1698-1747).

[29] Jane Butler (1699-1729)

[30] Con relación a Agustine II, es poco lo que se sabe. Nació en 1720. Se casó con Anne (o Ann) Aylett que nació en 1726 en «Nominy Plantation». Al fallecer Agustine I, según su voluntad, la tierra ahora conocida como «Mount Vernon» pasaría a su hijo mayor, Lawrence VI; sin embargo al morir éste, no dejó herederos; por consiguiente, Agustine II le seguía como beneficiario, pero prefirió mantener la propiedad del Popes Creek y le cedió el «Mount Vernon» a su medio hermano George Washington, presidente de los EE. UU. Agustine II murió en mayo de 1762.
[31] José Ball (abuelo materno de George Washington, presidente de EE. UU.): nació el 24 de mayo 1649 en Inglaterra. Murió el 11 de julio 1711 en Epping Forest, condado de Lancaster, Virginia. Fueron sus padres: William Ball y Hannah Atherold, quienes se casaron el 2 de julio 1638 en Londres, Inglaterra, y pasaron a ser los bisabuelos maternos de George Washington, presidente de EE. UU. Willian Ball nació en Millenbeck, condado de Lancaster, Inglaterra y murió el 15 de octubre 1680 en Londres, Inglaterra.

[32] Mary Bennett: Abuela materna de George Washington, presidente de EE. UU.

[33] George Washington, futuro presidente de EE. UU.

[34] Betty Washington: Nació el 20 de Junio de 1733 en Westmoreland County, Virginia y se casó con Fielding Lewis en 1750. Entre sus hijos encontramos a Lawrence VII y Robert Lewis. El primero contrajo matrimonio con Eleonor Parke Custis, nieta de Martha Dandrige Custis, esposa de George Washington, primer presidente de EE. UU. Betty murió el 31 de marzo de 1797.

[35] Samuel Washington: Nació el 16 de noviembre de 1734 en Pope's Creek, Wakefield, condado de Westmoreland, Virginia. En el condado de Stafford, Virginia ocupó varios cargos, como juez de paz, magistrado y alguacil del condado y oficial de milicia. Residió en Mount Vernon de 1735 a 1738. Se casó cinco veces: primero con Jane Champe, con la que no tuvo hijos. Segundo con Mildred Thornton, quien nació alrededor de 1741 y murió en 1763, posiblemente durante o poco después del parto. Su prima, también llamada Mildred Thornton, se casó con el hermano menor de Samuel, Charles. Este matrimonio tuvo dos hijos: Thornton Washington (1760-1787) y Tristram Washington (nacido en 1763). Tercero con Lucy Chapman, tampoco tuvieron hijos. Cuarto con Anne Steptoe (1737-1777) y le nacieron cuatro hijos: Fernand (1767-1788), George Steptoe (1773-1808), Agustine III Lawrence (1775-1824) y Harriot (1776-1822), y quinto con Susannah Perrin, sólo tuvieron un hijo que no llegó a la edad adulta, John Perrin (1781-1784).Samuel murió en 1781.

[36] John Agustine: (1736-1787). Fue miembro del Quinto Convenio de Virginia y miembro fundador de la Compñía de Tierras del Mississippi. Durante la revolución americana perteneció al Comité de Seguridad del condado de Westmoreland’s y presidente de la comisión del condado para el alivio de Boston. Contrajo matrimonio con Hannah Bushrod en 1756. Vivió con su familia en Mount Vernon. Uno de sus hijos, Bushrod Washington fue magistrados de fue la Corte Suprema de Justicia.

[37] Charles: Nació en Hunting Creek, condado de Stafford (ahora condado de Fairfax) Virginia, el 2 de mayo de 1738. Se casó con Mildred Thornton, hija del coronel Francisco Thornton y Frances Gregory alrededor de 1761. Luego, entre abril y octubre de 1780 se trasladó al condado de Jefferson, Virginia Occidental, donde fundó «Charles Town». Murió en 1799, un poco antes de la muerte de su hermano, George, presidente de EE. UU.

[38] Mildred: (1739-1740).

Referencias Bibliográficas

1. Agustine Washington: En Internet:

2. Augustine Washington Jr. En Internet:

3. Agustine Washington y su hijo George Washington, desde 1694 hasta 1743. En Internet:
http://www.nps.gov/archive/gewa/Gus&history.htm

5. Familia Washington. En Internet:

6. Genealogía de George Washington. En Internet:
http://familypedia.wikia.com/wiki/George_Washington_(1732-1799)

7. Margaret Butler. En Internet: http://thepeerage.com/p17991.htm#i179902

8. Mary Ball Washington. En Internet:

9. Sulgrave. En Internet: http://en.wikipedia.org/wiki/Sulgrave

10. Sulgrave Manor: El hogar ancestral de los Washingtons en Gran Bretaña. En Internet:
http://www.sulgravemanor.org.uk/index.htm
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Semblanza sobre George Washington

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Por: Thomas Jefferson Randolph[1]


La siguiente semblanza sobre George Washington, después de su muerte, fue escrita por Thomas Jefferson Randolph. Por considerarla de gran Trascendencia, la publicamos en nuestro blog y la tomamos de la obra de Frau Abrines, Lorenzo. DICCIONARIO ENCICLOPÉDICO DE LA MASONERÍA. Tomo III. Editorial del Valle de México, S. A. México. 1976. Pp. 1.954 – 1.957.

«Su inteligencia, aunque no fuese de primer orden, era vasta y poderosa; como grande era su penetración, aunque no tan viva como la de un Newton, de un Bacon o de un Loke. Nunca he conocido un juicio más sólido y recto que el suyo. Era lento en sus operaciones, porque la inventiva y la imaginación no le prestaban gran ayuda; pero sus conclusiones eran terminantes y seguras. Sus oficiales tenían bien observado las ventajas que sabía deducir y obtener de las distintas opiniones que emitían en sus consultas: siempre escogió la mejor y ningún general le ha igualado jamás, en saber combinar tan juiciosamente, como él solo sabía hacerlo, sus planes de batalla. Pero si por cualquier causa imprevista se desbarataba cualquiera de estos planes o sufría sensible alteración, era muy lento para modificarlo o volverlo a reconstituir. Así es, como le sucedió en algunas ocasiones, que se quedaba parado sobre el campo de batalla; pero nunca experimentó la menor sorpresa ni vacilación, cuando se trató de operar contra un enemigo atrincherado o fuerte en sus posiciones, como dio de ello tantos y tan repetidos ejemplos en Boston, New York y en muchos puntos fortificados. Era inaccesible al temor y afrontaba personalmente los más inminentes peligros con una indiferencia y tranquilidad inimitables. La prudencia era quizá el distintivo más pronunciado de su carácter. Nunca tomaba una decisión, ni emprendía ningún movimiento, sino después de haberlo reflexionado y previsto todo maduramente, deteniéndose todo el tiempo que fuese necesario, si se le ofrecía alguna duda, hasta verla completamente disipada o resuelta. Pero desde el momento que adoptaba una resolución, marchaba directa y decididamente a su objeto, sin que hubiera ningún obstáculo que bastara a detenerle, por grande que fuese. Su integridad era la más pura, y su espíritu de justicia el más inflexible de cuantos he conocido. Ninguna consideración de interés personal, de parentesco, de amistad, ni de odio, consiguió nunca doblegar sus decisiones. Era realmente en toda la extensión de la palabra, un sabio; un buen hombre y un gran hombre. Era de natural irritable y tirante, pero la reflexión, la fuerza de voluntad y el dominio que ejercía sobre sí mismo, regulaban constantemente estas propensiones, que raras veces dejaba traslucir; pero si por alguna circunstancia extraordinaria llegaba a olvidarse de su imperturbable circunspección, entonces su cólera tenía algo de espantoso Era espléndido, pero exacto en sus gastos; contribuía liberalmente a todo lo que tenía un fin útil; pero se hacía sordo y daba su más rotunda negativa, a cuantos llamativos se le dirigían en demanda de su apoyo o de su caridad, en pro de proyectos quiméricos o para remedio de necesidades que no fueran realmente dignas de ser atendidas. No era apasionado ni ardiente en sus afecciones, pero sabía calcular con exactitud el mérito de cada cual, otorgándole desde luego estimación sólida y adecuada a sus merecimientos. Su figura era hermosa, su estatura arrogante, su marcha reposada y noble. Era el mejor jinete de su tiempo, y puesto a caballo, tenía el exterior más gallardo que se pueda dar. Tomaba muy poca parte en las conversaciones, aunque fuera en el reducido círculo de sus amigos. Su oratoria y estilo eran medianos, porque no tenía fluidez de ideas ni facilidad de locución. Cuando se veía precisado a expresar su opinión en público sin haber tenido tiempo de prepararse, hablaba penosamente y con cierto embarazo; sin embargo, describía con facilidad y en el estilo correcto aunque pecaba de algo difuso».

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[1] Thomas Jefferson nació en Shadwell (Virginia) el 13 de abril de 1743, en el seno de una familia acomodada. Fue el tercero de los diez hijos (dos de los cuales nacieron muertos) del matrimonio formado por Peter Jefferson y Jane Randolph, dueños de una plantación que llevaba el nombre de la ciudad. Fue el tercer presidente de los EE. UU. entre 1801 y 1809. Anteriormente también había ocupado los cargos de Secretario de Estado (1790-1793), Vicepresidente (1797-1801) y de gobernador de Virginia (1779-1781).

Fundó en 1792, junto con James Madison el Partido Republicano (posteriormente conocido como Demócrata-Republicano) que se oponía a las tesis defendidas por el Partido Federalista. También es conocido por el hecho de ser el autor principal de la Declaración de Independencia de los EE. UU. y por fundar la Universidad de Virginia (1819), que fue declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad en 1987.

Jefferson murió a la edad de 83 años el 4 de julio de 1826 en Monticello, Virginia.
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